Posted by J.

Me carga que la gente use la palabra "ciencia" como antónimo de "arte". Da la peor impresión posible. Me refiero a frases como "sí, cocinar es más un arte que una ciencia". Wrong, plain wrong. La ciencia y el arte, aunque distintos, no son opuestos. Ambos son igual de valiosos. Cierto, la penicilina ha salvado millones de vidas. La música también, y eso siempre lo pasamos por alto.
Ambos requieren pasión y convicción e intensa humanidad. Dividirlos, oponerlos, nos hace dividir y oponer a la gente. Estas fotos describiendo la lateralización del cerebro ("yo soy el hemisferio derecho. Soy artístico y colorido y feliz. Yo soy el hemisferio izquierdo. Soy gris y científico y matemático) hacen lo mismo. Nos hacen creen que la ciencia no puede ser colorida, que el arte no puede ser preciso. Que ser metódico es privilegio de los laboratorios, que ser espontáneo es privilegio de los talleres de pintura. Hacen que nos olvidemos que tenemos los dos hemisferios, y que hacemos ambas cosas. Son complementarios.
El arte y la ciencia siguen el mismo principio: Aunque distintos, son complementarios e igual de necesarios. No demonicemos ninguno, no sacralicemos ninguno.

Saber  

Posted by J.

Saber que el problema era un asunto químico en su cerebro no ayudaba en nada. Saber que  el verdadero problema era que ese asunto químico se habría quedado callado si no hubiera leído tantos libros no ayudaba en nada tampoco. Saber que el asunto en realidad era una enfermedad seria que quizás se extendería toda la vida no lo hacía menos excitante. Saber que Cortázar llevaba muchos años muerto no hacía que sus ojos fueran menos claros ni sus comentarios menos agudos. Saber que la voz de Cortázar era una alucinación no lo hacía querer conversar menos con él. Saber que las idas de Cortázar a la librería eran la forma en la que su cerebro justificaba las pastillas no significaba que Cortázar le hiciera menos falta. Saber que envidiar a un paciente es impropio de un psiquiatra no hacía que me sintiera menos envidioso.

El Primer Relato de los Sor  

Posted by J.

"Has aprendido sobre el origen de los Runa, los Koul y los Otrorianos, y conoces la naturaleza de las Primeras Canciones. Has visto a Dios y al Diablo, y has peleado con ángeles y demonios, y has sobrevivido. Has leído los antiguos Quipus y Códices de los dioses, y eres el hombre con más conocimiento de las cosas antiguas que habita la tierra. Esta noche, la asamblea de los dioses te recibe, Nosoros de la Orden del Desastre, para que escuches este, nuestro Primer Relato, la más antigua de las memorias de los Sor, los dioses primigenios."


En el principio, despertó Tael de noche, en el lugar que llamamos Ieria. Al despertar Tael, supo que él sabía mil y un cosas que le pertenecían a él y solo a él, y tuvo conocimiento de la naturaleza del mundo y su constitución, pero se dio cuenta de que no poseía ninguna memoria. Quien le despertó fue Ezhengo, el encadenado, anciano incluso en aquellos días. Y vio Tael que Ezhengo tenía una gran herida en el pecho, como hecha con un arma de hierro afilado, y entonces vio que su propio pecho estaba atravesado por un arma como la que seguramente había herido al encadenado, y vio que esta arma lo mantenía en el suelo, y no le permitía moverse. Y le mostró Ezhengo a Tael que a su al rededor, la multitud de los dioses se hallaba congregada, todos inmovilizados de la misma forma que Tael. Y ayudó Ezhengo a Tael a liberarse del arma que lo oprimía, y la herida que quedó en el pecho de Tael fue grande y terrible, y nunca pudo cerrar. Y luego Tael y Ezhengo juntos liberaron a todos los dioses que los rodeaban, y algunos de ellos se levantaron y caminaron, y otros muchos no resistieron ser liberados, y sus vidas fueron breves y llenas de dolor. 

Cuando la multitud de los dioses estuvo libre, Tael y Ezhengo se detuvieron a observar la forma de Ieria, y vieron en el horizonte una gran pirámide, y tuvieron ambos la certeza de que esa pirámide era fruto de la inventiva de los dioses, aunque ninguno tuviera memoria de haberla formado. Y caminaron ambos hacia la pirámide del horizonte, y al llegar, supo Tael que Ezhengo no tenía autorización para cruzar la entrada de la Pirámide, y le dejó atrás. Y caminó Tael hacia la cúspide de la Pirámide, y desde allí observo toda Ieria, y supo que aquella no era la primera vez que observaba el mundo, y que aunque no recordaba días anteriores a ese, tuvo certeza de que llevaba mucho tiempo vivo y que él era Rey de Ieria desde hace mucho. Y se volteó Tael hacia el altar en la cúspide de la Pirámide, y encontró un Quipu que rezaba "Hemos hecho esto para evitar males mayores que los que nos han sobrevenido. Nos sellamos a nosotros mismos en la esperanza de disminuir las consecuencias de nuestras obras. Las espadas que atraviesan nuestros pechos devoran nuestras memorias, por cuanto anhelamos no conocer la magnitud de nuestra propia monstruosidad."

Y supo Tael en ese momento que aunque aquél era el primer día que recordaba de su vida, incluso entonces ya estaba el mundo plagado de secretos, por cuanto antes de despertar, había sido él un Sor distinto, del que no tenía ningún conocimiento.

Este es el Primer Relato de los Sor, los dioses primigenios, qué desconocen el verdadero origen de todo lo que existe, por cuanto quienes fueron antes de ser quienes son decidieron que el olvido era mejor que la sabiduría.

Otro distinto  

Posted by J.

Fragmento de algo que puede llegar a ser un poema más largo, y que me asaltó a eso de las cuatro de la mañana un día tres, temprano, antes de que empezara el año. 

Te recuerdo poco, quizás nada - y acaso menos que nada.
Y es que como ya no te amo ni te deseo...
me paso el día en mis letanías, mis poesías, mis melodías
y nada de anhelarte, de extrañarte,
Nada, nada - y acaso - menos que nada.

Me paso el día en el camino, mirando el cielo
O en un libro, mirando letras
O en un vaso, mirando gente,
O en un cuchillo, mirando tele
O a veces hasta me olvido y no miro ni una weá xD

Pero a veces... solo a veces, (y no te pases películas)
a veces vuelves.

A veces alguien sonríe, y bam! que todo vuelve.
Y es que cuando sonríen yo los miro, nada más
pero me sube una weá... qu'es entre risa y pena!
porque sonríen < tan > < mal >! porque tú 
tú! tú! sí que sabías sonreír.
No saben nada de sonreír!
qué van a saber, si nunca te vieron a ti?

No saben nada de esa alegría que te desborda los dientes
que se te escapa de los labios,
que te sube por los ojos y se esconde en tu nariz!
de esa risa que te mueve el pelo y te ilumina la frente
y te enrosca la lengua dentro de la boca.

Y es que juran de guata que se sonríe con la cara y nada más!
pero tú sí que sabías sonreír.
Con el cuerpo entero, con las manos y los dedos,
con el cuello, con los hombros y los pies!
con tus pasos, y tus gestos, con la espalda y con los lentes.
Tú sonreías con tu ropa, tus bufandas invernales tus vestidos veraniegos
sonreías con tu estuche y tus plumones y tus aritos de colores!
Si hasta a veces te vi sonreír con una vela, una pizza y una mesa!

Tú sí que sabes sonreír. Qué van a saber ellos? todos, todos sonríen mal!

Mundos Paralelos  

Posted by J.




3 años y medio de amistad y enamoramiento unilateral. Esperábamos el metro. Audífonos azules en los oídos, cabello rosado. Me gustaba más el azul de hace algunas semanas que el rosado. Los ojos grandes, limpios, clavados en algo lejano, pensando. Llega el vagón, lo haces parar con un dedo, me miras y te ríes. Me río contigo, un poco amargo. Te hundes en tu música de nuevo. Varios minutos.  De pronto, tus cejas se arquean levemente, pero tu frente se relaja. Las comisuras de tus labios se elevan un poco, casi nada, tan poco que si tu boca no fuera perfecta, sería imposible de notar. Cambia el ritmo de tu pecho. Le recuerdas, lo sé, y me duele. Ojalá Buenos Aires estuviera más lejos. Ojalá no lo conocieras. Ojalá no lo quisieras.


3 años y medio de amistad y enamoramiento unilateral. Esperábamos el metro. Un audífono negro en el oído derecho, el oído izquierdo está libre, para escucharme bien si te hablo. El vagón llega y lo hago parar con un dedo, jugando. Te miro y me río, y me sonríes de vuelta. Miras mi pelo rosa. Me pregunto qué te provoca. Me hago una trenza, y mi pelo cambia de color, por el teñido desigual. Sé que te gusta la trenza roja. Sé que preferías la trenza azul. De pronto, un mensaje. Lo miras, lo lees y lo lees de nuevo, varias veces, como siempre. Sonríes sin amargura, cosa a la que no te acostumbras todavía. Un mensaje de ella. Lo sé, y me duele. Ojalá no la conocieras. Ojalá no la quisieras.


3 años y medio de amistad y enamoramiento unilateral. Esperamos el metro. Audífonos azules en los oídos, cabello rosado. Me gustaba más el azul de hace algunas semanas que el rosado. Los ojos grandes, limpios; clavados en algo lejano, pensando. Llega el metro, lo hacés parar con un dedo, me mirás y te reís. Me río con vos, y te hundís en tu música de nuevo. Varios minutos. De pronto, tus cejas se arquean levemente, pero tu frente se relaja. Las comisuras de tus labios se elevan un poco, casi nada! tan poco que si tu boca no fuese perfecta, no se nota. Cambia el ritmo de tu pecho. Te acordaste de él, lo sé, y me duele. Ojalá que Santiago estuviera más lejos. Ojalá no lo conocieras. Ojalá no lo quisieras.

Plata y lapislázuli  

Posted by J.

You should go.


Los siniestros dioses jamás respondieron a las súplicas de sus pobres seguidores.
Jamás dieron consuelo, jamás trajeron paz. Los siniestros dioses solo hacen caer fuego
sobre las cabezas de los hombres, y los únicos que atenderán a los ruegos de la humanidad
tienen cuerpos y sangre, y mueren también.

Y el único consuelo en la tierra, en esta vida o la otra
es el beso de la mujer que amas.
Es la caricia del padre que te guarda
es el abrazo del hijo que te renueva.




 

Posted by J.

Mora mi alma imperecedera oculta
En medio del Imperio de los Dragones.
Junto a la menor, mi menor oculta la primera pieza
Junto al sol, mi menor oculta la segunda pieza
Repito, mi menor oculta la tercera pieza

Pero junto a la menor y a mi menor,
Y junto a los dos soles,
Y Repito, a la menor,
protegida por la armonía de una Stella yace
la entrada oculta a mi alma imperecedera.